El Poder Del Aquí Y Ahora

El Dalai Lama (Tenzin Gyatzo)

Dra. Luz de Lourdes Eguiluz

miércoles 14 de julio de 2021

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EditorialEdiciones Urano
ISBN9786077482482

Este mes de julio y aún sin terminar a pandemia quiero comentarles un libro sencillo y rápido de leer, pero con una gran sabiduría en sus páginas. Se titula “El poder del aquí y ahora” y el autor es el Dalái Lama (Tenzin Gyatso), el libro está basado en una serie de entrevistas sobre temas trascendentes para el budismo y publicado por Ediciones Urano en 2021.

Comenzaré, como es mi costumbre, señalando algunos datos sobre el autor su santidad Tenzin Gyatzo, nacido en 1935 por lo que cuenta en la actualidad con 86 años, es el decimo cuarto Dalái Lama reconocido como tal en febrero de 1940, lider intelectual y político del pueblo tibetano, se hizo acreedor del Premio Nobel de la Paz en 1989 y a pesar de su gran relevancia como pensador y escritor, ha tenido que vivir exiliado en Dharamsala, India.

Una parte muy importante de las enseñanzas del Buda es que todo fenómeno debe ser visto como mutuamente interdependiente de lo que se deduce que nada surge sin una causa. De este modo la felicidad como el sufrimiento, no surgen de la nada, todos los fenómenos ocurren debido a causas y condiciones específicas.

Según el budismo los seres humanos somos capaces de experiementar el sufrimiento de tres formas distintas:

  1. sufrimiento a través del dolor físico
  2. el sufrimiento debido al cambio y
  3. el sufrimiento omnipresente.

Los monjes budistas sugieren el camino medio que significa moverse en forma dinámica entre ambs extremos experimentando uno y otro, es necesario enfrentar el sufrimiento del mundo exterior, así estaremos en el Aquí.

Buda escogió y enseñó el camino medio, renunció al mundo, partió en soledad y practicó la austeridad durante cinco años, al cabo de los cuales se dio cuenta que esto no era sufiniente, entonces usó su inteligencia y cultivó la sabiduría y con ello logró la iluminación por primera vez. De esa manera Buda primero fue consciente del sufrimiento y para eliminarlo uso la inteligencia con lo cual empezo a cultivar la sabiduría.

Actualmente con los adelantos de la psicofisiología se ha demostrado lo importante que resulta cultivar los valores internos porque nos genera bienestar, tenemos que volver a ocuparnos de las virudes y fortalezas humanas y dejar de utilizar tanto timpo y esfuerzo en conseguir bienes materiales. La sociedad moderna esta orientada hacia la utilidad, la productividad y laa ganancia, olvidadndo que los valores humanos y los amigos compasivos son la mayor riqueza.

El amor al prójimo y el apego son dos cosas muy distintas, cuando los padres tratan a los hijos como una propiedad, los mandan a escuelas prestigiosas para que ellos tengan amistades ricas y poderosas, eso es apego, es la diferencia entre valres superficiales y valores más profundos. Porque en el mundo moderno actual, se tiende a valorar a las personas según su utilidad.

Los valores humanos básicos considerados como de mayor importancia son el afecto y la bondad, es importante recordar que en las civilizaciones más antiguas de cazadores-recolectores, era una sociedad totalmente igualitaria, no importaba quien cazaba la presa, el animal se repartía entre todos y este era el método más efectivo para asegurar la supervivencia de toda la comunidad. Pero con la llegada de la agricultura se dio una transformación de la sociedad humana, porque los granos recogidos, a diferencia del animal cazado, se podían guardar, los grupos sociales se establecieron, ya no eran nómadas y en ese lugar podían coservar objetos, muebles y otros enseres. Las diferencias sociales se hicieron notables y la brecha entre ricos y pobres empezó a ser cada día mayor

A medida que la inteligencia se hacía dominante, la gente empezó a hacer diferencias basdas en la utilidad y se aceptó la violencia de aquellos que matabana en búsqueda del poder y la riqueza. Con el avance de las sociedades industriales el poder de la comunidad declinó y la gente se olvido de que eramos animales sociales, empezamos a vernos como individuos que viven vidas separadas, ya no era posible poner freno al insensato dominio del intelecto. Los seres humanos se han convertido en máquinas de producción, lo que no deja espacio para cultivar el afecto o la compasión hacia los demás. 

Cuando trabajamos y cooperamos con otros y existe una confianza básica mutua, cuando estamos llenos de amor y compasión, nuestro sistema inmunitario es más vigoroso y nuestra capacidad para resistir las enfermedades aumenta considerablemente.

La ciencia ha demostrado que la salud mental y la salud física están estrechamente relacionadas. El miedo, la ansiedad y el estrés debilita el sistema inmunitario. También ahora sabemos que un estado relajado de compasión y bondad produce paz interna, sustenta y aumenta el funcionamiento del sistema inmunitario. La única manera para conseguirlo, es darnos cuenta de estos valores y esforzarnos por cultivarlos. 

Para llegar a la iluminación no basta recitar sutra ni repetir mantras, es necesario una cualidad mental, se requiere haber acumulado a lo largo de los años, tanto virtud como sabiduría. 

Por muy profunda que sea una enseñanza, como puede ser el budismo, si no se adapta a su tiempo no tendrá capacidad alguna para ayudar a los que sufren. Cuando el Dalái Lama visito la Universidad de Stanford en el 2005, participó en largas jornadas con destacados neurocientíficos de la Facultad de Medicina hablando sobre las formas en que surge el apego y el sufrimiento, de la misma manera ha participado en diálogos con investigadores y científicos de distintas partes del mundo. Defiende una sociedad basada en el amor y la bondad, en vez del sistema social basado en la ignorancia y la desigualdad, el esta aquí y ahora en la sociedad posmoderna.

Saludo a todos nuestros seguidores.

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Dra. Luz de Lourdes Eguiluz

La doctora Luz de Lourdes Eguiluz Romo estudió la Licenciatura en Psicología en la Universidad Nacional Autónoma de México, Campus Iztacala. Maestría en Terapia Familiar en la Universidad de las Américas. Tiene hecha la especialidad en Hipnosis Ericksoniana en el Instituto de Programación Neurolingüística de la Ciudad de Guadalajara y la Especialidad en Terapia Breve en el Instituto Mexicano de Terapias Breves afiliado al MRI de Palo Alto, California. Es profesora e Investigadora en la UNAM desde hace más de 25 años en el Área de Metodología de la Investigación.